Más de 500 brigadas de trabajadores de la Unión Eléctrica (UNE), principalmente linieros, laboran sin interrupción para dejar restablecido este jueves el suministro de electricidad en todas las zonas del país donde el paso de la tormenta tropical Laura provocó cortes en el servicio.

Lázaro Guerra Hernández, director técnico de la UNE, informó a Granma que hasta las tres de la tarde de este miércoles, 62 725 clientes permanecían sin corriente, lo que significa que el 98,5 % del total de usuarios ya dispone de tal prestación.

Precisó que los perjuicios más serios se encuentran en Santiago de Cuba y Guantánamo, la región donde Laura tocó primero tierra cubana y, por tanto, con mayor fuerza; además de Pinar del Río y Artemisa, por cuyas inmediaciones se alejó del archipiélago.

«Donde es más difícil –aunque sin duda se logrará restituir el servicio– es en las montañas de Santiago de Cuba y Guantánamo, así como en Sancti Spíritus y algunos lugares de La Habana y Artemisa», apuntó.

Las acciones para solucionar las consecuencias del evento, dijo Guerra Hernández, comenzaron inmediatamente después de pasar la tormenta, y se prevé culminarlas este jueves en su totalidad, a pesar de los trabajos complejos en zonas escarpadas.

Subrayó que, aun cuando se termine de restablecer totalmente el suministro eléctrico, el trabajo no acaba, pues podrían ocurrir averías menores que será necesario reparar.