Las condecoraciones a quienes enfrentaron el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas incluirán, con carácter póstumo, a los caídos en el cumplimiento del deber.

La heroica epopeya que significó la extinción del incendio de grandes proporciones en la Base de Supertanqueros de Matanzas, acaecido entre el 5 y el 12 de agosto pasados, se forjó con la valentía y entrega de cientos de hombres y mujeres, oficiales y civiles, varios de los cuales fueron condecorados, este miércoles, con órdenes y medallas aprobadas por Decretos Presidenciales, con la presencia del Primer Secretario del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

Fue esta la primera de varias ceremonias que se realizarán en diferentes puntos del territorio nacional para reconocer la hidalguía de quienes combatieron el siniestro. A los caídos en esa misión también les serán entregados los reconocimientos con carácter póstumo.

En el Salón de Protocolo de El Laguito, con la presencia de miembros del Buró Político, jefes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (Minfar) y del Ministerio del Interior (Minint), de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y de organizaciones políticas y de masas, el Jefe de Estado, a propuesta del Minfar, hizo entrega de la Orden Antonio Maceo a un grupo de oficiales y trabajadores civiles, por los éxitos extraordinarios alcanzados durante la sofocación del siniestro. A propuesta del Minint, se otorgó la Orden 6 de Junio de ii grado a seis oficiales y un trabajador civil.

Asimismo, fue conferida, a propuesta del Minfar, la Orden por el Servicio a la Patria de iii grado en las Fuerzas Armadas Revolucionarias, a 18 oficiales que forman parte de las tripulaciones de los helicópteros que participaron en la extinción del siniestro.

En el homenaje también fueron entregadas, por propuestas del Minfar y del Minint, las medallas Ignacio Agramonte de segunda y tercera clase; Calixto García; Por la Seguridad del Orden Interior de primera y segunda clase, y Por la Valentía durante el servicio de primera y segunda clase, a un grupo de oficiales, trabajadores civiles, voluntarios, sargentos y combatientes, por el cumplimiento destacado de sus respectivas tareas, que contribuyeron a extinguir las llamas del lamentable fuego.

«En esta medalla no solo va el reconocimiento hacia mi persona, sino a todos los compañeros que estuvieron allí en el incendio, a los que perdieron la vida, a ese pueblo matancero que todo el tiempo confió en nosotros, mostrando su apoyo y sabiendo que íbamos a cumplir la misión y que lo haríamos bien», declaró la teniente coronel Liset Braun Castellanos, jefa de la Sección Política de la Región Militar de Matanzas, quien recibió la Medalla Calixto García.

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