Lograr que la informatización de la sociedad cubana contribuya más y mejor al desarrollo económico del país y a la calidad de vida de la población, es uno de los principales desafíos que tiene por delante Cuba.

Conscientes de la importancia de multiplicar recursos humanos, económicos y financieros en las actividades de ciencia, tecnología e innovación, el Gobierno de La Habana y el Parque Científico Tecnológico (PCT) firmaron un memorando de entendimiento.

Una de las intenciones del acuerdo es que el Gobierno Provincial, los Gobiernos Municipales y las entidades subordinadas exploten al máximo las potencialidades que brinda el Parque. Durante su intervención, el director del PCT, Rafael Luis Torralbas Ezpeleta, recordó que, como dijera el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, a La Habana le corresponde marcar la vanguardia en la informatización del país.

«Nosotros entendemos que el Parque Científico Tecnológico de La Habana, puede convertirnos en una herramienta para el gobierno de la capital en la informatización de la sociedad, a partir de las oportunidades que se puedan brindar ahí, de los proyectos que podamos crear, de las nuevas empresas que ayudemos a formar. El Parque tiene la capacidad de unir esfuerzos entre las empresas, las universidades y los centros de investigación y esto es positivo para ambas partes».

El Gobernador de La Habana, Reinaldo García Zapata, enfatizó que la firma deviene una alianza estratégica, importante no solo para la capital, también para toda Cuba.

«Nuestro Presidente nos ha llamado constantemente a pensar todo el tiempo en qué más podemos hacer, a pensar como país también en el proceso de informatización de la sociedad. Esta alianza permitirá el fortalecimiento de la municipalidad a partir de la autonomía que se necesita y puede contribuir también al proceso de transformación que se lleva a cabo en los barrios».

Alianza que tributará a la soberanía tecnológica de la nación y acercará los adelantos de la informática y las comunicaciones a los barrios capitalinos. Homenaje también a Fidel Castro, quien siempre insistió en poner esos avances a disposición del desarrollo del país y de los sectores menos favorecidos de Cuba.